En 2015, hace ya diez años, se publicó este juego diseñado por Virginio Gigli y Simone Luciani con el arte gráfico de Klemens Franz. En alemán lo saca la editorial Lookout Games y en inglés Mayfair Games.
Un eurogame de la llamada escuela italiana. Virginio Gigli es uno de los componentes del equipo de diseñadores Acchittoca que habían sacado juegos como Leonardo Da Vinci (2006) o Egizia (2009). Mientras que los tres juegos anteriores de Simone Luciani habían sido diseñados junto a Daniele Tascini: Tzolki’n, Los viajes de Marco Polo y Council of 4.
Gran Hotel Austria fue su primera colaboración conjunta y el juego tuvo tanto éxito como para que saliera una segunda edición en ambos idiomas al año siguiente, una tercera en 2020 y una cuarta en 2022, además de edición deluxe en 2021. En español se publica los mismos años que estas nuevas ediciones, saliendo las dos últimas de la mano de Maldito Games.

Temática
La presentación del juego en su manual de instrucciones dice así: “A comienzos del sigo XX, Viena era una de las ciudades más importantes de Europa. Las calles estaban pobladas por artistas, políticos, nobles, ciudadanos y turistas, y el emperador gobernaba sobre ellos.
Te encuentras en plena Edad Moderna vienesa, probando suerte como hotelero. Por eso, debes ampliar tu pequeño hotel y preparar nuevas habitaciones. Mientras tanto, tus huéspedes demandan excelencia culinaria. Asegúrate de que cada uno de los huéspedes recibe un plato y bebida en condiciones. Puede que necesites contratar más personal. Además, no olvides rendir homenaje al emperador o caerás en desgracia muy pronto. ¡Enfrentate al desafío y convierte tu pequeño hostal en el Gran Hotel Austria!”
Por lo tanto, temáticamente regentamos un hotel que hay que llenar con clientes, darles de comer y después alojarlos en habitaciones. Para ello contamos con empleados, recursos de comida y habitaciones que debemos preparar en nuestro tablero individual.
Mecánicas
Como muchos euros de la escuela italiana, los dados están presentes en las mecánicas. Esta vez se tiran los dados y se colocan por su valor en un tablero central donde elegiremos las acciones a realizar. A saber: coger comida y bebida (strudel, tarta, vino y café), preparar habitaciones, contratar empleados, coger dinero o avanzar en el track del emperador, además de estar pendiente de cumplir los objetivos comunes.
La mecánica del uso de los dados se combina con los huéspedes disponibles que podemos alojar en nuestro hotel y que son de diferentes tipos según el color de la carta: nobles, artistas, ciudadanos y turistas. Cada uno debe alojarse en una habitación de su color salvo los turistas que funcionan a modo de comodín. No hay que olvidar que los empleados del hotel tienen cada uno un efecto diferente: beneficios de un solo uso o permanentes, de una vez por ronda o directamente de puntos de final de partida.
Es un juego muy combero que destaca por encima de la media. La gestión de la mano de cartas, el despliegue de habitaciones preparadas en nuestro hotel, estar pendiente del track del emperador que nos premia o castiga, así como saber coger los huéspedes necesarios y el dado más útil en cada uno de nuestros turnos, lo convierten en un euro excelente en cuanto a mecánicas y bastante creíble en la temática hotelera. El diseño aprieta, hay que tener cuidado con la elección de la acción del turno y tener muy presente el escaso dinero con el que vamos a contar.
Resalta de manera negativa y polémica la manera de jugar los turnos, que hace que haya mucho entreturno ya que para que un jugador vuelva a jugar tienen que jugar todos los anteriores dos acciones.
En cuanto a la producción, este aspecto cumple sin alardes, con cubos de colores para los recursos y un diseño de personajes adecuado para la época que quiere reflejar de la ciudad de Viena a principios del siglo pasado. La edición deluxe mejora componentes y cambia algo de la iconografía.

¡Bailemos un vals!, la expansión
Se hizo esperar pero como no podía ser de otra forma, en el año 2021 sale su expansión, Let’s Waltz!, publicada después de una campaña de kickstarter y que a España llegó en 2023 de nuevo gracias a Maldito Games con el nombre de ¡Bailemos un vals!.
Los entusiastas de Gran Hotel Austria no imaginábamos que una expansión pudiera mejorar un juego tan bien pulido pero, en mi caso, debo rendirme ante la calidad de esta expansión que me ha hecho necesario jugar siempre con ella.
¡Bailemos un vals! parte de la temática de que ahora los huéspedes de nuestro hotel, en vez de irse a dormir a su habitación pueden bailar el vals en una de las salas de baile disponibles. Esta expansión trae mucho contenido que se divide en cinco módulos que se pueden incluir individualmente o combinar entre todos ellos, además de un nuevo modo automa.
Módulo 1: Viena Ballrooms
Es el módulo principal de la expansión y el que le da título. Cuatro tableros por jugador que simulan las salas de ensayo de nuestros bailarines que desde allí irán a una de las tres salas de baile desplegadas (de las cinco disponibles) o al balcón a tomar el fresco mientras bailan. Ahora los huéspedes del hotel son más marchosos y pueden ir a bailar el típico vals vienés en vez de irse a la cama de su habitación. Este módulo nos obliga a usar las salas de baile si no queremos ser penalizados y con el atractivo de conseguir beneficios inmediatos y de final de ronda en las fases de emperador.
Se incluyen nuevas cartas de huéspedes y de empleados del hotel y además del nuevo recurso de champán, también hay nuevos objetivos de ronda y de emperador que se barajan con los del juego base.
Módulo 2: Celebreties
A nuestro hotel viene gente famosa como estas once celebridades que pueden esperar a ser atendidas en una sala exclusiva para gente VIP. Se incluyen 3 dados de colores que al robarlos nos permiten, previo pago de tantas monedas como dados queden en la acción usada, escoger a una de estas celebridades y disfrutar de sus efectos durante la ronda actual.
Módulo 3: Unique Hotels
Cada hotel se distingue del resto de la competencia con unas características individuales al ganar la puja por la loseta de entrada que identifica el nombre de nuestro negocio y nos da recursos y ventajas iniciales y durante la partida.
Módulo 4: Start Player
El peculiar (y criticado) orden de turno del juego base se sustituye por un turno normal en el que cada jugador realiza una sola acción pero con la nueva mecánica de poder robar la llave que nos dejará ser el jugador inicial en el próximo turno.
Módulo 5: Would you like some more?
La expansión incluye en este modulo nuevas cartas de empleados, cartas de objetivos y losetas de emperador. Componentes que siempre se agradecen.
Módulo Automa: Dinners for one
Cada vez es más reclamado por los jugadores que los diseños traigan un modo automa para poder jugar en solitario. Esta expansión también lo incluye.

Resumen final
En definitiva, Gran Hotel Austria es un juegazo, un diseño espectacular que se disfruta plenamente con el juego base pero que además mejora mucho con la expansión.
En primer lugar la parte importante de la expansión (módulo 1) es la temática del baile del vals. La nueva opción de mandar a los huéspedes a bailar, usando el champán y buscando ganar bonificaciones inmediatas así como de final de ronda del emperador, da otro nivel estratégico al juego. Ahora tenemos que utilizar esta nueva acción del baile que, además viene reforzada por cartas de empleados y de huéspedes que incorporan la temática del baile, sin perder de vista al recurso del champán. Solo por esto, que es mucho, ya vale la pena la expansión.
Después como segundo aliciente de esta expansión, tenemos el cambio necesario de orden de turno (módulo 4) con la nueva acción de poder robar el turno en la siguiente ronda. En mi opinión era más que necesario este cambio ya que la ronda serpenteante del juego base se hacía insufrible sobre todo al máximo de jugadores.
Que la expansión incorpore nuevas cartas de empleados, nuevas losetas de emperador, nuevas cartas de objetivos que se pueden añadir directamente al juego base (módulo 5). aumenta la variabilidad y es muy recomendable usarlas desde siempre, se quiera o no jugar con alguno de los otros módulos.
La asimetría de los hoteles diferentes (módulo 3) siempre viene bien para que cada jugador parta de un inicio diferente y, al igual que las caras de los tableros de hotel con habitaciones distintas, sirve para que el juego tenga más opciones de variabilidad.
Lo que menos me gusta porque me parece un poco insulsa, es la inclusión de las celebrities (módulo 2) que, aunque me gusta ver aparecer por el hotel a gente famosa como mi querido Charles Chaplin, no aporta mucho al juego, salvo que hay dados de colores y la posibilidad de usar a estos famosos como una opción más.
Por último, siempre está bien que haya un modo automa en el juego aunque en mi caso es raro que lo use salvo contadas excepciones.
En resumen, Let’s Waltz es una expansión más que recomendable si el juego base es de nuestros favoritos. Y si no lo hemos jugado, ya es hora de que como buen eurogame montemos nuestro hotel en la ciudad de Viena, demos de comer a los huéspedes antes de alojarlos en las habitaciones disponibles y les ofrezcamos la posibilidad de disfrutar de una velada de vals en uno de los salones de baile. Seguro que próximamente volverán a visitarnos…
Que maravilla de juego… que gran artículo
Sí, es un gran juego. ¡Gracias!